Real vs sintético

Hoy en día hay muy buenas imitaciones al diamante real y podemos confundirnos a simple vista.

¿Quisieras aprender a distinguirlas?

Aquí te ayudamos con algunos tips caseros:

Con vaho – Coloca la piedra que quieres investigar frente a tu boca y empáñala como empañarías un espejo. Si se mantiene empañada por un par de segundos, probablemente se trate de otra piedra. Un diamante real dispersa el calor de tu aliento instantáneamente y no se empañará con facilidad. Incluso en el tiempo que te toma empañarlo y observarlo, se aclarará con mucha mayor rapidez que uno falso.

Puedes utilizar una piedra que sepas que es real junto a la sospechosa y así empañar a ambas. Puedes observar cómo la piedra real permanece clara mientras que la falsa se mantiene empañada; si respiras repetidas veces sobre los diamantes falsos, verás que la condensación comienza a acumularse. Con cada soplo, la piedra falsa se empañará más y más mientras que la real permanecerá limpia y clara.

Leer el sello- Si la piedra esta montada intenta leer por dentro el sello del interior. Por lo general un diamante real no va a estar montado en un metal barato. Si lleva un sello con c.z significa zirconia cúbica, lo cual significa que es sintética.

Utiliza lupa de joyero para inspeccionar el diamante – Si una piedra es MUY perfecta probablemente sea una piedra sintética. Los diamantes naturales por lo general tienen imperfecciones llamadas “inclusiones” se pueden ver pequeñas manchas por dentro, "detallitos" negros (carbones) o "detallitos blancos" (plumitas) esto indica que el diamante es real, aunque imperfecto. Existe baja probabilidad pero si existen diamantes perfectos así que no te bases solo en este método.

Vaso de agua- Llena un vaso con agua y deja caer la piedra, si se cae hasta el fondo es diamante, si flota o se queda a la mitad no lo es.

Revisa algún desgaste- Los diamantes son conocidos por su dureza, si están raspados probablemente sea un diamante falso.

Ponerlo a contra luz- La manera en la que un diamante brilla es única. Uno verdadero tendrá tonos grises por dentro de la piedra, mientras que lanzará colores como el arcoíris. En el diamante falso solo se podrán ver colores del arcoíris dentro de la piedra.

TIPS:

• No pruebes o demuestres la autenticidad de un diamante al rayarlo con algo. Si es real, no le pasará nada, pero podrías astillarlo o romperlo, ya que los diamantes son duros pero quebradizos. Puedes usar una lija para diferenciar algunos diamantes falsos de los reales, pero no es una prueba completamente confiable. Aunque no sea un diamante real, aún podría pasar la prueba del rayado, dado que muchas piedras preciosas son muy duras. Por otro lado, si falla, solo habrás arruinado innecesariamente una joya que se veía como un diamante.

• Si lo llevas a alguna joyería a que te hagan la prueba para ver si es un diamante real NO pierdas de vista nunca la pieza y siempre ve con alguien de confianza.

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